Una multitud volvió a marchar ayer exigiendo que se llegue hasta el fondo. Una hija y dos yernos de Ramona Villalba están presos por el crimen.
El doble homicidio de un padre y su hijo a manos de una patota en el predio del Gauchito Gil en Mercedes por resistirse a la instalación de un puesto en la parte delantera de su casa lindante al predio, sigue estremeciendo a la comunidad y sus repercusiones alcanzaron notoriedad nacional: la respuesta gubernamental y judicial no calmó los ánimos. Ayer, familiares, allegados y pobladores interpelados por los asesinatos de Milton y Sergio Canteros, por lo que la Policía ha arrestado a 8 personas (7 varones, uno de ellos menor, y 1 mujer), volvieron a cortar la Ruta Nacional 123 a la altura de La Cruz Gil, donde el viernes pasado en horas de la tarde ocurrió el crimen. Exigían la intervención de la Justicia Federal para investigar a la desplazada interventora del lugar, Ramona Villalba, a quien acusan de haber sido la instigadora del ataque -algo aún no está acreditado por la Justicia (aunque entre los detenidos hay una hija suya y dos yernos) y negado por la susodicha en declaraciones periodísticas-, y que se investigue su patrimonio ya que insisten en que se ha enriquecido desde que fue designada por el gobierno provincial de entonces encabezado por el actual senador Ricardo Colombi (quien es oriundo de Mercedes y fue intendente de la localidad en los ‘90).
“Después de un abrazo simbólico en la Rotonda del Gaucho en la ciudad de Mercedes marcharon hasta el predio”, consignaron medios locales. El importante número de manifestantes cortó el tránsito de dicha carretera sin que se produjeran incidentes con los transportistas y demás usuarios de la vía de circulación ya que a cada hora habilitaban el paso. “El jueves fueron recibidos por el juez federal de Paso de los Libres, Gustavo Fresneda, y le presentaron un escrito para que comience a articular y dé vista a la Fiscalía Federal para que comience a investigar el supuesto lavado de activos”, detallaron.
En tanto, el Gobierno provincial puso en funciones al nuevo interventor, el ex comisario Víctor Isnardo, quien durante su presentación tuvo que dar explicaciones ante rumores de que existía un vínculo familiar con Villalba. “Investiguen mi árbol genealógico”, les dijo a los periodistas mercedeños.
La intervención en el Centro fue luego del doble homicidio ocurrido frente al predio de La Cruz Gil en la localidad correntina de Mercedes, días atrás. “Soy comisario retirado hace 6 años, tengo familia y vivienda radicada en Chavarría”, dijo el nuevo interventor. Por otro lado aseguró: “Lo primero que haré será un plan de trabajo que voy a presentar al Gobernador (Gustavo Valdés) en forma diaria. Haré un empadronamiento, relevamiento de los puestos, cuáles funcionan en forma legal e ilegal, y a los que no cumplen con la ley los vamos a desalojar cumpliendo con lo que el estatuto me dice”.
(Norte)