Al abordar el vuelo de regreso, el Vicegobernador habló anoche con época sobre el encuentro en Casa Rosada con el Presidente. El Gobernador lo designó para estar en la reunión en la que Guzmán expuso la estrategia de pago al FMI.
En el anochecer de un día agitado en Casa Rosada, como lo fue ayer, miércoles, el vicegobernador Pedro Braillard Poccard emprendió raudamente el regreso a Corrientes. Estuvo en Buenos Aires como representante correntino en la primera gran reunión del año que mantuvo el Presidente con las provincias para brindar un informe de situación y de estrategias en la negociación del pago de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Apenas media hora después de salir de la sede del Gobierno nacional, Braillard Poccard abordó el vuelo que lo trajo de vuelta a la provincia y, en un par de minutos, habló con época y dio un primer balance del encuentro. "La información fue muy importante. Creo que el gobernador (Gustavo Valdés) decidió tener presencia, más allá de que él y otros gobernadores de la oposición van a tener una reunión la semana que viene con el Presidente. Pero consideró que era importante que la provincia estuviera representada, en este caso por mí", dijo el Vicegobernador en comunicación telefónica.
En este sentido, insistió: "La información es muy importante, yo se la transmitiré al Gobernador y finalmente él dará una opinión, no me corresponde a mi darla en estos momentos", aclaró.
Cuando se le consultó si el encuentro se desarrolló en un clima ameno, Braillard Poccard indicó que "la reunión se llevó a cabo en un marco institucional; estuvieron la mayoría de los gobernadores, varios vicegobernadores y algunos ministros (de Economía de las provincias). El Presidente estuvo todo el tiempo junto con el Jefe de gabinete y el Ministro de Economía. Yo estuve al lado del secretario general de la presidencia y del gobernador de Formosa", describió el segundo del Gobierno correntino.
Finalmente, indicó que "al presidente Alberto Fernández lo saludé y le agradeció al gobernador Valdés la presencia de Corrientes. Agradeció a la oposición su presencia".
Reunión
Con una exposición de casi una hora a cargo del ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, y en casi tres horas de reunión, con un tramo final de preguntas, respuestas y varias críticas al gobierno anterior, se llevó a cabo el encuentro en el Museo del Bicentenario.
El condimento especial fue el inicial rechazo a asistir por parte de los tres gobernadores radicales de la oposición (además de Valdés, del jujeño Gerardo Morales y el mendocino Rodolfo Suárez) y del Jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. Sin embargo, un día después, los tres primeros cambiaron de opinión y, si bien mantuvieron su postura de no ir, acordaron hacerlo la semana que viene y enviar este miércoles representantes provinciales.
Para el caso de Corrientes, viajó el vicegobernador Pedro Braillard Poccard.
En la ocasión, el Gobierno nacional explicó que la principal diferencia con el FMI está centrada sobre el peso del ajuste que Argentina propuso y que hasta ahora el organismo multilateral de crédito no convalidó. "Lo que piden es un programa de ajuste del gasto real versus tener un programa que le dé continuidad a esta recuperación de la economía", indicó Guzmán.
Al respecto, señaló que "el sendero fiscal es el punto en el que no hay acuerdo".
Por su parte, Alberto Fernández se mostró optimista sobre las conversaciones con el FMI, pero remarcó un límite en las negociaciones: "Para nosotros, ajustar la economía es achicarla, dejar de crecer y hacer más difíciles las obligaciones que tenemos con los acreedores externos". "Por lo tanto, la palabra ajuste está desterrada de la discusión; para nosotros, el secreto es crecer", aseguró el Mandatario.
"Queremos que todos unamos esfuerzos para poder plantearle al mundo la necesidad de los países deudores de no encontrar en la postergación y en la falta de crecimiento una solución al problema de la deuda, y esa es la lógica central de nuestro planteo", afirmó.
Tras el informe de Guzmán, se abrió un espacio para las preguntas, que fue protagonizado por los gobernadores con mayor alineación con el Gobierno nacional. Así, hablaron el de Santa Fe, Omar Perotti; su par del Chaco, Jorge Capitanich; el de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof y el de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, entre otros. En casi todos los casos, expresaron fuertes críticas al gobierno de Mauricio Macri por tomar deuda "irresponsablemente".
(Epoca)