INTERNACIONAL | Rusia culpa a Ucrania por el asesinato de la hija del filósofo que defiende la invasión

La vocera de la Cancillería rusa dijo que los investigadores seguían una "pista ucraniana", según la cual el ataque podría haber sido cometido por Ucrania. Por su parte, el asesor de Zelenski, negó las acusasiones, e insinuó que la mujer fue asesinada por "ultrarradicales" rusos.


Rusia dijo este domingo que la hija de un filósofo nacionalista cuyas teorías han dado sustento ideológico a las justificaciones del Kremlin para invadir Ucrania murió al explotar una bomba bajo el vehículo que conducía cerca de Moscú y que el Gobierno ucraniano podría haberla asesinado, lo que eleva la animosidad tras seis meses de guerra.

Ucrania dijo que no tuvo "nada que ver" con la explosión que ayer mató a Daria Duguina, periodista y politóloga de 29 años hija de Alexander Duguin, un intelectual y escritor al que medios occidentales describen a menudo como "cerebro" o uno de los mentores ideológicos del presidente ruso, Vladimir Putin.

Los vínculos de Duguin con Putin, sin embargo, no están claros, aunque el Kremlin frecuentemente se hace eco de la retórica de sus escritos y de sus habituales apariciones en la TV estatal rusa para hablar sobre la política exterior del país o la guerra en Ucrania, a la que se asocia con la invasión rusa en curso en ese país.

Duguin es uno de los pensadores que ha popularizado el concepto de "Nueva Rusia", que el Gobierno de Putin ha usado para justificar la anexión de la península ucraniana de Crimea, en 2014, y su apoyo a rebeldes separatistas alzados en armas en el este de Ucrania desde ese mismo año.

El Comité de Investigación de Rusia, el organismo encargado de las investigaciones penales, dijo este domingo que Duguina murió cuando el auto en que circulaba explotó y se incendió como consecuencia del estallido de una bomba adosada en la parte inferior del vehículo.

La joven "murió en el lugar" de la explosión, una autopista cerca de la localidad de Bolshie Viaziomy, a unos 40 kilómetros de Moscú, dijo el Comité de Investigaciones en un comunicado.

La nota agregó que el comité abrió una investigación por "homicidio" por la muerte de Duguina, informó la agencia de noticias AFP.

La vocera de la Cancillería rusa dijo que los investigadores seguían una "pista ucraniana", según la cual el ataque podría haber sido cometido por el Gobierno ucraniano.

"Si se confirma la pista ucraniana (...) y eso deberán verificarlo las autoridades competentes, estaremos hablando de terrorismo de Estado por parte del régimen de Kiev", dijo la vocera, Maria Zajarova.

Un asesor del presidente ucraniano, Volodimir Zelenki, rechazó las sospechas rusas.

"No somos un Estado criminal, como Rusia, y definitivamente no somos un Estado terrorista", dijo Mijailo Podoliak a la TV estatal de Ucrania.

"Ucrania no tiene nada que ver" con el atentado con bomba que ayer mató a la hija del filósofo Alexander Duguin en Rusia, agregó Podoliak.
Allegados a la familia de Duguin dijeron a agencias de noticias rusas que el objetivo del ataque había sido el intelectual, ya que padre e hija habían viajado juntos a un festival tradicional y que, por motivos no especificados, Duguina decidió regresar del evento sola.

La agencia de noticias estatal rusa TASS dijo que, según resultados preliminares de la investigación a los que tuvo acceso, la explosión fue resultado de la detonación de al menos 400 gramos de TNT plantados bajo el vehículo, del lado del conductor.

El intelectual Duguin promueve a Rusia como un país religioso, cristiano, de valores tradicionales y liderazgo paternalista, y desdeña los valores liberales de Occidente.

Duguina expresaba visiones similares como comentarista del canal de TV nacionalista ruso Tsargrad.

En marzo había sido sancionada por Estados Unidos por su trabajo como jefa de edición de United World International, un sitio de Internet al que Washington acusa de diseminar desinformación y propaganda prorrusa.

Al anunciar las sanciones, Estados Unidos citó un artículo suyo de este año en el que decía que Ucrania iba a "perecer" si se adhería a la OTAN, la alianza militar transatlántica liderada por Washington.

Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero pasado luego de que Estados Unidos rechazara las exigencias de Putin de archivar los planes de adhesión a la OTAN de la exrepública soviética, algo que Moscú ve desde hace décadas como una amenaza a su seguridad y una "línea roja" que nadie debe trasponer.

Putin ha dicho varias veces que uno de los objetivos centrales de la invasión es proteger del Gobierno de Kiev a ucranianos rusoparlantes que no se sienten representados por las autoridades que dirigen el país.

El líder de Donetsk, una de las dos provincias separatistas del este de Ucrania, acusó  al Gobierno ucraniano del atentado contra la hija de Duguin.

"Los terroristas del régimen ucraniano intentaron liquidar a Alexander Duguin, pero mataron a su hija", afirmó Denis Pushilin, líder de la "república" que separatistas ucranianos han proclamado en la provincia oriental ucraniana de Donetsk.

En tanto, un responsable regional del servicio de seguridad interna e inteligencia de Ucrania (SBU) fue encontrado muerto en su casa con heridas de arma de fuego, informaron hoy autoridades, en medio de una amplia purga del SBU con motivo de la invasión rusa.

La Fiscalía general de Ucrania dijo en un comunicado que Oleksandr Nakonechny fue encontrado por su mujer ayer en un cuarto de su departamento en la ciudad de Kropivnitski después de que esta escuchara disparos.

Un político local, Andrii Lavrus, escribió en Telegram que Nakonechny se había disparado una bala en la cabeza, informó la agencia de noticias AFP.

El mes pasado, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, despidió al jefe del SBU, Ivan Bakanov, uno de sus amigos de la infancia, alegando que no hacía lo suficiente para proteger al país de espías y colaboradores rusos en el marco de la guerra con Rusia.

Por otra parte, los líderes de Estados Unidos, Francia, Alemania y Reino Unido pidieron hoy "contención" militar alrededor de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la más grande de Europa, después de que en las últimas semanas Moscú y Kiev se acusaran mutuamente de ataques cerca de la planta, ocupada por fuerzas rusas.

El presidente estadounidense Joe Biden y el francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz y el primer ministro británico Boris Johnson pidieron en una conversación telefónica conjunta el envío "rápido" al lugar de una misión de inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), según un comunicado común.

En la charla, los cuatro dirigentes occidentales también "convinieron que se mantiene el apoyo a Ucrania en su defensa ante la agresión rusa", consignó la agencia AFP.




(Telam)