Los organizadores de la Séptima Marcha por la Soberanía hacia el lago Escondido desde El Bolsón denunciaron que este miércoles nueve manifestantes y una fotoperiodista fueron interceptados violentamente por peones rurales que responderían al magnate británico Joe Lewis, luego de que intentaran ingresar por el Camino de Tacuifí al polémico lago Escondido. Hubo además dos manifestantes heridos a piedrazos.
La movilización
comenzó este sábado en El Bolsón, reclamando la apertura del “camino de
Tacuifí” para llegar al lago a cuyas orillas el magnate británico Joe Lewis
construyó la mansión --allí donde un extranjero no podía comprar tierras-- y
apropiándose en la práctica de un espejo de agua: el único camino habilitado
hoy para llegar es de muy difícil acceso, solo para montañistas.
El segundo grupo
--el de los que no pueden emprender la extenuante caminata-- intentó ingresar
este miércoles al lago por el camino de la polémica --el Tacuifí--, a través
del cual se llega más fácilmente, primero en auto y luego a pie. Pero esta vía
está cerrada por un grueso portón de hierro que custodiaban los pequeños
propietarios de los 11 campos que hay que bordear o atravesar, antes de llegar
a la mansión del magnate inglés. Hay una sentencia ya que habilita la apertura
de este camino --y una ratificación--, pero no se ejecutan porque los abogados
de Lewis y del resto de los propietarios han apelado e intentan llegar a una
instancia superior.
Una pequeña
parte de los manifestantes que se presentaron en el portón de hierro logró
sortearlo a través de un camino lateral. Entonces apareció un grupo que atacó a
los caminantes tirándoles los caballos a rebencazos. Entre los atacados estaba
el diputado y jefe de bloque del Frente de Todos en el Parlasur --Gastón
Arispe-- y una fotógrafa de Télam, Alejandra Bartoliche. Ese grupo también
lanzó piedrazos a quienes solicitaban desde el otro lado de la reja ingresar
hacia el lago Escondido (un joven fue lastimado en la frente y debió ser
trasladado en ambulancia). Los manifestantes no respondieron la provocación y
se retiraron.
En la
movilización frente al portón, el diputado por el Frente de Todos Daniel Gollan
dijo: “Hay gente con bandera argentina defendiendo a un inglés que está
usurpando tierras y que no dejan llegar a un lago que es de los rionegrinos y
de los argentinos y de todo el mundo que quiera ingresar".
De la marcha por
la Soberanía participan organizaciones gremiales como la CTA Autónoma, CTA de
los Trabajadores, ATE, el sindicato Federación Gráfica Bonaerense, La Cámpora,
la CGT regional zona norte, el Movimiento Socialista de los Trabajadores y el
Movimiento Octubres.
Estas marchas
suelen durar tres días y esta vez se vive un clima de especial tensión con un
centenar de policías en la zona. Los barrotes del portón de la discordia habían
sido untados con grasa de camión y se les había colocado alambres de púas. Los
manifestantes intentaron derribarlo con piedras y una amoladora, pero no
pudieron. Entonces ocurrieron los forcejeos con la fuerza de choque civil,
compuesta por 25 personas a caballo y a pie con rebenques, gomeras y gas
pimienta que arrojaron hacia el otro lado del portón. Los manifestantes dicen
haber identificado a quien tiró el gas y sería Pablo Puchi, dueño del comercio
sobre la ruta y del primer campo, uno de los propietarios más activos.
En ese contexto
llegó una persona diciendo ser abogado y representante legal de Lewis y de los
vecinos, insistiendo en que querían paz y esperaban una resolución definitiva
de la justicia para que el transito sea público. Ante esto, los dirigentes de
la marcha propusieron concretar una mesa de diálogo y están a la espera de una
respuesta para llevar a cabo una negociación.
(Pagina 12)