Luego de tocar un máximo de 350 pesos la semana pasada, el circuito cambiario marginal descomprimió un poco la tensión especulativa. Fuerte suba de las acciones y el Banco Central compró 55 millones de dólares.
El dólar blue se desinfló 16 pesos este lunes para cerrar en 322 pesos. Se
aleja de esta forma del pico de 350 pesos alcanzado el 22 de julio pasado. El
contado con liquidación, en tanto, se mantuvo en niveles cercanos a 326 pesos.
El Banco Central pudo comprar dólares en el mercado de cambio por 55 millones,
a pesar de la demanda por las compras de energía que implicó una salida de
divisas por más de 100 millones de dólares.
La especulación cambiaria, que provocó un aumento de las cotizaciones
financieras y del blue de casi 100 pesos en algo menos de 30 días, ofreció un
respiro a comienzo de la semana. La moderación se acompañó con un fuerte rebote
en el precio de las acciones de la bolsa porteña, que llegaron a subir más del
7 por ciento en algunos casos, y de los bonos soberanos. El riesgo país
retrocedió medio punto a niveles de 2957 unidades.
Rumores y especulación
Desde el mercado, no obstante, mantienen recargadas las apuestas por una
fuerte devaluación del tipo de cambio oficial, aprovechando las dificultades
para acumular reservas internacionales, en meses en que la compra de energía es
alta y el campo liquida menos. A esto último se le suma que la significativa
brecha cambiaria potencia aún más la no liquidación del agro.
En este clima de fuerte especulación circulan rumores y ruidos de distinto
tipo, no sólo vinculados con la política sino con las opciones de política
económica que se podrían llegar a implementar. Desde más subas de las tasas de
interés en pesos, aumento en las colocaciones de dólares futuros y más
controles para las importaciones y el turismo, hasta la posibilidad de un
desdoblamiento cambiario o de un cambio de régimen monetario. Cada día circula
un rumor nuevo.
Las medidas que ya están en marcha
El equipo económico, más allá de agregar instrumentos, tiene en marcha una
batería de medidas para atravesar las presiones de las próximas semanas. El
último mes se anunciaron herramientas concentradas en la regulación cambiaria
(controles a la compra de divisas de bienes no esenciales, más impuesto para la
demanda de divisas de turismo, y una mayor flexibilidad para acceder a las
divisas a sectores estratégicos para la producción). También en garantizar la estabilidad
de los precios de los bonos en moneda local, con el lanzamiento de instrumentos
como la opción put para los títulos en pesos e intervenciones en el mercado
secundario.
Para el mercado la pregunta del millón es si serán suficientes. Lo que se
suele mencionar en los informes de la city es que el Gobierno intentará llegar
hasta agosto (o septiembre) sin devaluar. Esto se debe a que en ese momento
cambia la estacionalidad, es decir baja la demanda extraordinaria de dólares
para energía, al mismo tiempo que vuelve a acelerarse la liquidación de divisas
por la cosecha fina.
En septiembre, no obstante, el equipo económico también enfrentará nuevos
desafíos porque se acumulan importantes vencimientos de deuda en pesos. En este
punto fue importante la recuperación de títulos como el tx26 ajustados por
inflación. Este lunes subió 0,8 por ciento y acumula un alza del 26 por ciento
en lo que va del mes. Había sido uno de los más afectados por la corrida de
mediados de junio. También generó cierto alivio la fuerte suba de las acciones
del Merval a comienzo de esta semana, en la cual empresas como YPF aumentaron 7
por ciento tanto en la bolsa porteña como en el mercado de Nueva York. Los
bonos soberanos en moneda extranjera en tanto se negociaron con subas de hasta
casi 2 por ciento.
Los ojos en el viaje de Silvina Batakis a Estados Unidos
El equipo económico no realizó anuncios en la primera jornada de la semana,
pese a los rumores de los últimos días, luego del encuentro del presidente
Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner el sábado pasado, y las
reuniones del titular del Banco Central, Miguel Pesce, con la ministra de
Economía, Silvina Batakis, antes del viaje de la titular de Hacienda a
Washington.
Batakis se juntó este lunes con la titular del Fondo Monetario
Internacional, Kristalina Georgieva, luego de haberse reunido con David Lipton,
asesor de la titular de la Secretaría del Tesoro, Yanet Yellen. En estos
encuentros no sólo se buscó trasmitir el estado de situación de la macroeconomía
local, sino recalibrar algunas de las metas acordadas con el Fondo Monetario
por el efecto que generó el estallido de la guerra en Ucrania.
El salto de la inflación desde marzo, y su aceleración en las últimas
semanas por la corrida contra los bonos en pesos, que luego derivó en el ajuste
de los dólares financieros y el intento de forzar una devaluación del dólar
oficial, es uno de los puntos en que se concentran las preocupaciones. El
equipo económico considera que evitar una devaluación del tipo de cambio
mayorista es clave para poder reacomodar la situación de precios. Los analistas
coinciden en que un salto brusco del dólar mayorista podría espiralizar la
inflación.
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