LUEGO DE CASI TRES DÍAS CON PARADERO DESCONOCIDO | Joven estaba desaparecido y lo encontraron muerto en un zanjón

Juan Gabriel salió en moto de su casa el jueves. El viernes habló con su pareja y luego perdieron contacto. Ayer fue hallado sin vida junto al vehículo dentro de un canal de desagüe, mientras la familia realizaba manifestaciones en pedido de ayuda para buscarlo.


Juan Gabriel Romero, de 23 años, salió el jueves a la noche de su vivienda del barrio San Roque Oeste de la ciudad de Corrientes y estuvo desaparecido hasta ayer, cuando lo encontraron sin vida junto a su motocicleta en el interior de un zanjón.

El hallazgo se produjo a la siesta al costado de una calle del asentamiento del barrio Pirayuí, en una zona de curva frente al complejo "50 Viviendas", donde el canal de desagüe está rodeado de maleza.

De acuerdo a la información lograda por diario época, el joven vestía iguales ropas con las cuales fue visto por última vez en la mañana del viernes.

En principio, una de las hipótesis indica que Romero cayó a la zanja sin que nadie lo advirtiera.

Las autoridades debían realizar la autopsia pertinente para determinar la causa de muerte y establecer si tenía algún tipo de "herida provocada" por terceros, tal como deslizaron sus seres queridos apenas conocieron la noticia.

La familia, que temía algo malo, radicó la denuncia policial para la búsqueda de paradero y a la par realizó manifestaciones públicas para visibilizar el caso.

El sábado a la noche y el domingo desde la mañana allegados al joven interrumpieron el tránsito en el cruce de las avenidas Maipú y Alta Gracia.

Con quema de cubiertas, golpe de palmas y pancartas pidieron por la urgente aparición del muchacho padre de tres chicos.

De acuerdo a lo manifestado de parte de su pareja, en la última foto que compartió en su estado de WhatsApp, Juan Gabriel estaba acompañado de un hombre, un conocido, en zona del asentamiento del barrio Pirayuí.

Aquel hombre fue citado el fin de semana a prestar testimonio como testigo por ser la última persona en mantener contacto con el joven.

En sus dichos habría manifestado que compartieron una reunión en su domicilio después de jugar a la pelota y el viernes a la mañana su amigo "agarró la moto y se fue".

Su teléfono celular acusó como apagado desde aquella jornada a eso de las 10. Aproximadamente a tal hora "dejó de recibir mensajes y llamadas".

Al ausentarse de la vivienda que posee en calle Futaleufú, Gabriel lo hizo vestido de short y una musculosa negra porque iba a ir a jugar al fútbol.

Romero circulaba en una motocicleta Appia 150 negra, vehículo que fue localizado ayer junto a su cuerpo.

Las personas movilizadas en tratar de dar con el muchacho consultaron en comisarías y hospitales. En todos los establecimientos las respuestas apuntaron en igual sentido: no había registros del ingreso de un hombre con esa identidad.

Distintas áreas de investigaciones tomaron parte en procura de establecer qué pasó con Romero y determinar si sufrió un accidente o bien alguna agresión.

Ayer, la pareja del joven aportó una remera de él para que la División Canes con perros rastreadores buscaran rastros en la zona donde fue visto la última vez.

"A raíz de una denuncia realizada ante la Comisaría Decimoquinta se solicita la colaboración para la localización y restitución del ciudadano Romero Juan Gabriel, de 23 años", había difundido la Policía.

"Sus características físicas son las siguientes: de contextura física robusta; cabellos color negro oscuro; tez morena, ojos de color marrón oscuro, tatuajes en el brazo izquierdo con el nombre Juan Cruz y otro en la pierna derecha con una imagen de Jesucristo y la inscripción Mamá y Papá. Vestía una malla de color celeste, una musculosa color negra y ojotas blancas", puntualizaba el comunicado.




(Epoca)