LA IMPRESIÓN DESCONTROLADA | El gobierno asumiría la realidad, evalúan un billete de $10.000

Con el cambio de mando en la Casa de la Moneda se pondría en marcha una actualización de la nominalidad. El hornero se depreció un 90%.


Los especialistas aseguraron que el billete de $1.000, el de más alto valor en la Argentina, ya perdió un 90% su poder de fuego. En términos prácticos, el billete que nació hace poco más de un lustro -en noviembre de 2017- con la figura del "hornero" como emblema, ha perdido en el camino nueve veces su valor y hoy representa algo así como $100. 

"Si pretendemos actualizar el valor de la moneda, o mejor dicho, acomodarla a la realidad del proceso inflacionario, deberíamos tener un billete de nueve mil pesos, pero lo ideal sería redondearlo en un billete de $10.000", afirmó Beatriz Luisa Ávila, senadora nacional por la provincia de Tucumán, quien la semana pasada presentó un proyecto para apurar la creación de nuevos billetes con denominación más alta. La iniciativa tiene pocas chances de prosperar en el Congreso, Ávila lo sabe y reconoce que la idea es abrir el debate, algo que ya consiguió. En la Casa Rosada tienen en estudio el tema y podría haber novedades en los próximos días.
"Es imprescindible y urgente solucionar la vida de la gente que necesita efectivo y manejar un número razonable de billetes, que a veces no se consiguen ni siquiera en los cajeros automáticos", explicó ayer la legisladora tucumana -aliada de JxC- a una radio local.
La inflación es un problema en términos económicos, pero también en términos prácticos. Según el diario porteño Ámbito Financiero, durante el año 2022 el Banco Central de la República Argentina (Bcra) puso en circulación 1.419 millones de billetes de $1.000. Hoy ese billete, que es el de más alta denominación, tiene solamente el 18% del valor adquisitivo que tenía en 2017, cuando se puso en circulación. "Esta caída del valor real del peso, al tiempo que se producía el estancamiento del valor nominal, se refleja en que el billete de mayor denominación actual en Argentina es el segundo entre los que menos valor tienen, en dólares, en toda la región", detalló Ávila.
La definición de poner billetes en circulación no depende del Congreso de la Nación, sino de la Casa de la Moneda, que está bajo el control del área económica del Gobierno. En el último recambio de gabinete el ministro plenipotenciario, Sergio Massa, despidió al mendocino Rodolfo Gabrielli de esa función. Esta semana asumirá el nuevo titular, Ángel Mario Elettore. 
El renovado directorio de la Casa de la Moneda tendría una misión, apurar la impresión de billetes de mayor valor; podría ser de $5.000, incluso hasta de $10.000. El Gobierno del Frente de Todos parece por fin dispuesto a rendirse ante la realidad inflacionaria. Aliviaría un problema de la gente y las empresas, y hasta posiblemente dejaría de importar billetes de España y de Brasil, donde se imprimen los "horneros" argentinos.




(Norte)