JUDICIALES | Muerte de la modelo en Retiro: quién es Martín Del Viso, el juez que sorpresivamente liberó al empresario Sáenz Valiente

El magistrado asumió a fines de 2018 y tuvo otra causa de impacto: el crimen del jugador Lucas González. Hizo carrera en la justicia de la ciudad de Buenos Aires.


En su corta carrera como juez de instrucción nacional -asumió en diciembre de 2018- a Martín Del Viso le tocó investigar dos causas complejas y de alto impacto. Primero el crimen del jugador de 17 años de Barracas Central Lucas González -en la que detuvo y procesó a los acusados de ser los autores materiales y los cómplices del hecho- y ahora la muerte de Emmily Rodrigues, la joven brasileña de 26 años que falleció tras caer seis pisos al vacío en un edificio del barrio de Recoleta el 30 de marzo pasado.

Del Viso es el magistrado más joven del fuero criminal nacional. Tiene 42 años, es de bajo perfil y, como lo definió un colega, -una de las fuentes consultadas por Infobae para esta nota- “viene de otro palo”. Del Viso hizo toda su carrera judicial en la justicia de la ciudad de Buenos Aires.

Se recibió de abogado en agosto de 2005 en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Casi inmediatamente ingresó a trabajar a la justicia de la ciudad de Buenos Aires. Tuvo antes un paso por el estudio de abogado “Bullo”. Entró en 2005 como escribiente auxiliar al juzgado Penal, Contravencional y de Faltas 14. Allí recorrió todo el escalafón: fue también escribiente, oficial, prosecretario letrado hasta llegar a secretario. Luego puso un paso por la Defensoría Oficial. También en profesor universitario y tiene posgrados en derecho penal.

Como secretario de la justicia de la ciudad intervino en una toma de terrenos en 2014 en el barrio de Villa Lugano. El predio, en la avenida Cruz y Pola, fue desalojado con orden judicial y hoy allí está el barrio Papa Francisco.

Su salto a la justicia nacional ocurrió a fines de 2018 cuando asumió como titular del juzgado número 28, en el quinto piso del Palacio de Tribunales. Se presentó al concurso 297 para cubrir ocho vacantes en primera instancia. Quedó segundo en una de las ternas. Fue de la última camada grande de jueces nuevos que llegaron al fuero cuando asumieron 16.

Era el distinto. Todos venían de carrera en la propia justicia de instrucción o en la federal, todos acostumbrados a lidiar con causas pesadas. Del Viso llegaba de una justicia nueva, que tenía delitos penales menos complejos. “Es muy preparado y esa diferencia puede jugarla a favor. Y el rodaje de un lugar más difícil se hace andando”, dijo una fuente que trabajó con él. En el fuero algunos lo señalan que mantiene la mirada de la justicia de la ciudad donde el sistema es acusatorio e investigan los fiscales. “Por ejemplo, delega todas las causas en la Fiscalía”, plantea un colega.

Cierto que apenas llegado a la función, a Del Viso atravesó los problemas del fuero que tienen todos sus colegas. Uno de ellos es tener otro juzgado a su cargo. Y así fue como en juzgados que subrogaba le tocó dos causas de alto impacto. La primera fue en noviembre de 2021 cuando fue asesinado Lucas González. El jugador de 17 de año salía de entrenar de Barracas Central cuando el auto en el que iba fue atacado a tiros por una brigada de policías de la Ciudad de Buenos Aires.

En la causa se mezcló la política por los cruces entre el gobierno nacional y el de la ciudad. Del Viso detuvo y procesó a 14 efectivos. Los acusados de ser los autores del crimen y los responsables del encubrimiento. El juicio oral comenzó el mes pasado.

En ese expediente, el juez vivió la exposición pública y sus consecuencias. La familia de González lo denunció por mal desempeño ante el Consejo de la Magistratura de la Nación por no haber aceptado un planteo de detención. La causa está en la Comisión de Disciplina del Consejo.

Y hace poco menos de un mes tramita el expediente por la muerte de la joven Rodrigues, sobre quien se investiga si se tiró o la arrojaron del sexto piso de un departamento de Recoleta. Lo hace en el juzgado 31 que también subroga. Allí esta semana tomó la decisión de dictarle la falta de mérito y ordenar la libertad del empresario Francisco Sáenz Valiente, dueño del departamento donde ocurrió el hecho y acusado de femicidio.

“Resulta innegable que existen aún varias interrogantes que no pudieron responderse, y esto solo se explica con las dificultades que representa la investigación de este particular episodio”, señaló el juez en su resolución en la que ordenó que el caso se siga investigando con nuevas medidas. Entre ellas el allanamiento al departamento de Recoleta y la casa de la víctima y la reconstrucción del hecho.

“Son de esas causas que te hacen el cuero duro”, graficó un juez. De esas que pueden foguear al magistrado más joven del fuero.





(Infobae)