BARRIO PIRAYUÍ NUEVO | Policía disparó su arma en riña de partido de fútbol por dinero

Un sargento participó de un triangular con equipos que apuestan plata. Varios rivales lo acusaron de no soportar la derrota y causar incidentes. Fue filmado detonando una pistola. Luego una mujer denunció agresiones a golpes y señaló al efectivo como a sus hijas.


Un efectivo de la Policía fue protagonista de una serie de incidentes durante un triangular de fútbol barrial en la zona sureste de la capital provincial donde lo filmaron mientras lanzaba amenazas a sus rivales e incluso efectuó al menos un disparo con una pistola.

Luego de la riña de gran magnitud en medio de una cancha, una mujer concurrió hasta la comisaría para denunciar al funcionario público y a dos de sus hijas como responsables de intimidaciones y golpes.

Se trata de un sargento ayudante identificado como Julio Caballero, quien el sábado mientras estaba en su día de franco de servicio participó de un encuentro entre equipos del barrio Pirayuí Nuevo.

"Participaron el equipo de Caballero, otro del asentamiento y uno más de un señor que también vive en el barrio. Juegan por plata, entonces nadie quiere perder", explicó un vecino "cansado de las peleas" que genera ese tipo de disputa "deportiva" casi todos los fines de semanas y sus respectivas secuelas.

De acuerdo a las versiones de testigos, el policía habría montado en cólera "porque perdía" y supuestamente empezó a jugar brusco. La acción finalizó en una "pelea a trompadas" entre más de diez hombres a la cual se sumaron algunas mujeres.

Sin embargo, todo comenzó a pasar a mayores cuando el funcionario corrió hacia un costado de la cancha y buscó un arma de fuego. Sería la pistola reglamentaria calibre 9 milímetros que el Estado le asignó para desempeñar su función de brindar seguridad.

En la comisaría seccional Vigesimosegunda una mujer identificada como Elizabeth Rosario R., de 21 años, decidió asentar una denuncia penal en contra de Caballero y las hijas del hombre.

"Como su equipo estaba perdiendo el partido contra el equipo de mi barrio (el del asentamiento) él empezó a jugar sucio, a empujar y a incitar a otros jugadores a pelear", manifestó.

La joven agregó: "Entonces el partido se detuvo y dentro de la cancha querían evitar inconvenientes. Pero se terminaron agarrando entre todos a golpes de puño y patadas".

En medio de la trifulca, según la versión de Elizabeth, las hijas del policía, a quienes nombró como Daniela y Estela, la atacaron agarrándola de los "pelos y con un palo". Saldo de ese cruce la denunciante indicó sufrir una lesión en el rostro a la altura de la boca.

Una de las personas que miraba el partido fue testigo de la reyerta y comenzó a grabar con un teléfono celular lo que pasaba en medio de la cancha situada en calle José Ferraud, entre Secundino Riquelme y Ruiz Díaz Gabino, en las 500 Viviendas del Pirayuí Nuevo.

En la grabación viralizada a las pocas horas en los grupos de WhatsApp, y también en otras redes sociales como Facebook e Instagram, aparece Caballero como el protagonista principal.

El sargento ayudante bajo total estado de alteración manipuló el arma de fuego mientras encaraba a los rivales. Durante ese contexto se oyó una detonación. "Sacó un arma de fuego, efectuó un disparo al aire y comenzó a gritar a todos los otros jugadores, amenazándolos", dijo la joven.

Por su parte, ayer las hijas del efectivo hicieron una defensa pública mediante comentarios en las publicaciones de las redes digitales. Las mujeres justificaron el accionar de su padre porque los contrincantes del otro equipo "tenían machetes".

La Policía indicó ayer no tener registros de personas lesionadas de arma blanca o de fuego en relación a estos incidentes.

El caso llegó a conocimiento de los altos mandos y se aguardaba una decisión acerca de las medidas "internas" con respecto al integrante de la institución pública quien en otra oportunidad mantuvo problemas de conducta. Mientras, el proceso judicial vinculado a la denuncia formalizada continúa su curso en forma separada.



(Epoca)