A OCHO AÑOS DE LA MUERTE DE "MAXI" AQUINO | Fue liberado "Josele", condenado a 22 años por homicidio simple
La Corte Suprema de Justicia dejó sin efecto la condena. Ayer el TOP resolvió otorgar la liberación para el único sentenciado por el caso. Un estudiante universitario fue la víctima.
La resolución de liberar al único acusado en la muerte del joven estudiante de Agronomía, oriundo de la localidad de San Roque, fue dictaminada por el Tribunal Penal Oral (TOP) N°2, bajo caución personal, luego de 8 años del crimen y tras un fallo de la Corte Suprema de Justicia que dejó sin efecto la condena. Pero queda supeditado a la causa.
Altamirano además deberá cumplir con algunas disposiciones para mantenerse en libertad: no podrá cambiar de domicilio ni salir de la ciudad sin autorización, tendrá que continuar su tratamiento psicológico y tener alguna actividad que le genere ingresos. No podrá consumir estupefacientes y tendrá que asistir a tribunal cada vez que su presencia sea requerida.
Además, no puede tener ningún tipo de contacto con los familiares de la víctima, señala parte del fallo.
Vale recordar que la única prueba "contundente" que lo llevó a prisión fue una mancha de sangre hallada en el pantalón de "Josele", el cual la primera pericia dio negativa para sangre humana, pero un segundo examen realizada en Resistencia, dio compatible para sangre humana de Aquino y otro patrón de ADN que no pudo corroborarse.
Analía, madre de "Josele" Altamirano, desde la detención por el caso y durante las jornadas de debate ratificó la inocencia de su hijo. Dijo: "Es un perejil que está pagando por algo que no hizo" asegurando ante la prensa que contaba con fotografías de los verdaderos culpables del crimen.
El hecho
"Maxi", de 21 años, oriundo de la localidad correntina de San Roque, en la madrugada del 1 de agosto de 2015 salió de una peña universitaria que se desarrolló en el Club de Regatas, en la capital provincial. Decidió acompañar a una amiga hasta su casa a pocas cuadras del lugar bailable. Es así que ambos transitaron por calle Rolón y luego retomaron por Uruguay al 300, a pocos metros de llegar a calle Baibiene, fueron interceptados por dos delincuentes a bordo de una moto 110 centímetros cúbicos de color oscuro. Ante un intento de robo, "Maxi" se adelantó y evitó que Melissa resulte lastimada. Proteger a su amiga le costó la vida. Uno de los delincuentes, quien vestía, según testigos y que se desprendió del testimonio de la joven, un buzo tipo canguro color verde y sin mediar palabra alguna, asestó varias puñaladas al joven, dejándolo tendido en la calle. Melissa pidió ayuda a gritos y algunos estudiantes de la zona, que también habían concurrido a la peña, fueron a su ayuda. El cuerpo de "Maxi" presentó cinco puntazos letales, las heridas llegaron al corazón, el pulmón, el bazo y el pubis; y un total de 14 puñaladas más en distintas partes del cuerpo.
(Epoca)