POR QUÉ NO SE DECLARA LA EMERGENCIA HÍDRICA | Las necesidades de los productores se contraponen con los trámites burocráticos

Hay pasos legales y administrativos que requieren tiempos. En el centro y sur provincial, hay hacienda en el agua y plantaciones perdidas. 


 PASO TALA EN PERUGORRÍA QUEDÓ TOTALMENTE CUBIERTO POR EL AGUA Y HUBO QUE EVACUAR LA TOTALIDAD DE LA POBLACIÓN Y DE LA HACIENDA. SEGÚN EL MINIS­TERIO DE LA PRODUCCIÓN, EN ESA ZONA ENTREGARON ALIMENTO BALANCEADO A LOS PRODUCTORES QUE TUVIERON QUE TRASLADAR SUS ANIMALES.

Un 30 por ciento de la actividad productiva de las zonas centro y sur de la pro­vincia se perdieron como consecuencia de las lluvias y la inundación extraordinaria registrada desde el domingo 7 de enero. Este porcentaje es el que informó en los últimos días la Asociación de Socie­dades Rurales de Corrientes, es por ahora estimativo y surge de un primer releva­miento realizado entre los productores. 

Entienden que el sec­tor arrocero, ganadero, frutihortícola, tabacalero y apícola son los que ma­yores daños registran. Los pequeños y medianos pro­ductores arroceros de la cuenca del río Corriente, continúan con 4.000 hec­táreas de sus plantaciones de arroz con más de medio metro bajo el agua. 

Otro tanto, ocurre con los tabacaleros de la zona ru­ral de Goya. La apicultura y las plantaciones de tomate y morrones bajo tendalero sufrieron daños, casi com­pletos, en el sector rural de Bella Vista, Santa Lucía y Lavalle, que días antes de las lluvias perdieron todo tras el tornado registrado el 29 de diciembre último.

En lo que se refiere a la cantidad de cabezas de ga­nado afectado aún no tie­nen cifras específicas, pero desde las sociedades rura­les de Goya, Mercedes, y de Perugorría, expresaron su preocupación porque los animales siguen en el agua, o en pequeñas lomadas de terrenos, o en las rutas, pero tienen escasas pasturas para alimentarse.

El panorama es urgente y sobre todo desalentador. Los municipios de Mercedes, La­valle y Esquina ya declararon la emergencia hídrica, como para acelerar los tiempos y que las intendencias puedan gestionar ayuda. El martes último un grupo de diputa­dos provinciales de la oposi­ción presentaron un pedido para que la Provincia declare la emergencia hídrica. 

EXPLICACIONES

El que se refirió a este pe­dido y explicó por qué aún la Provincia no avanza con este paso fue el ministro de la Producción, Claudio Ansel­mo, quien enumeró que hay trámites administrativos que deben cumplimentarse para avanzar con una declaración de emergencia.

En ese sentido, recordó que hay una comisión que debe evaluar los perjuicios ocasionados, también que el daño debe ser superior al 50 por ciento de las produccio­nes.

"Hay que entender que las declaraciones de emergencia y/o desastre agropecuario es­tán enmarcadas en un régi­men legal una ley provincial y nacional. La ley provincial en realidad es una ley de ad­hesión al régimen nacional que establece un sistema de prevención y de acción sobre las situaciones que requiere una serie de evaluaciones", explicó el funcionario. 

"Se necesita la interven­ción de una Comisión Pro­vincial que tiene actores tan­to del sector público como privado y la determinación concreta de cuáles son los daños que hay parámetros mínimos, el daño tiene que ser superior al 50 % de pér­dida. Eso todavía es difícil de poder determinar en las si­tuaciones que estamos atra­vesando".

Anselmo recordó que "por otro lado hay que es­tablecer cuál es el alcance tanto geográfico como los cultivos afectados, eso es lo que lleva a que el proceso desde el momento en que ocurre un evento climático a que están dadas las con­diciones para la declaración de emergencia agropecuaria su homologación, etcétera, que requiere un decreto, en primer lugar una evaluación del ministerio, la reunión de la comisión, el decreto provincial y luego la homo­logación nacional no es cor­to, nunca demora menos de tres meses". 

"Esto permite poner en marcha algunos beneficios tanto de carácter fiscal como crediticio ahora, más allá de esa situación, la propia ley habilita a nuestro Ministerio de Producción como auto­ridad de aplicación a tomar ciertas acciones y medidas con base en los fondos dis­ponibles", aseguró durante una entrevista con radio Dos. 

Frente a este panorama está claro que la urgencia de las miles de familias corren­tinas que se ven afectadas, tanto en sus viviendas, en sus vidas cotidianas, como en sus actividades produc­tivas, por el clima, está lejos de encontrar una solución inmediata. Por ahora, según el Ministerio de la Produc­ción de la provincia, se está trabajando para la asistencia y el acompañamiento a los afectados. 

"El Gobierno está siguien­do la situación desde cerca y en primer lugar lo que se ac­tuó fue para evitar los impac­tos inmediatos que fue la si­tuación de cortes de ruta por roturas de alcantarillas, pa­rajes rurales anegados como el caso de Paso Tala que hubo que prácticamente evacuar­los en su totalidad, acciones directas estamos estos días entregando a la zona del Perugorría ya alimento ba­lanceado a los productores que tuvieron que trasladar su hacienda, o la evaluación que hicimos de la situación de la tormenta que afectó a fines de año pasado a la zona de Bella Vista".

EVALUACIÓN DE DAÑOS

Muchos terneros no sobrevivieron a las lluvias

La ganadería es uno de los sectores productivos que hace un año sufrió la falta total de pasturas como con­secuencia de la sequía extre­ma y los incendios feroces que quemaron hasta 13 % de la superficie provincial. 

"Eso hizo que se declarara la emergencia agropecuaria que duró hasta el 31 de di­ciembre, y no pasaron ni 15 días del nuevo año para que las lluvias nos inundaran los campos", quien señala esto es Gastón Giqueaux, presidente de la Sociedad Rural de Goya.

Con miles de hectáreas ahora bajo el agua, Giqueaux agradeció la ayuda recibida por el Ejército y otras ins­tituciones que asistieron a productores y ciudadanos de parajes y de la misma ciu­dad de Goya con alimentos, productos de primera nece­sidad y rescatando a los que quedaron aislados.

"Lo primero que se hizo fue atender a la parte huma­na. Ahora estamos comen­zando a evaluar los daños en la producción ganadera, aunque es imposible sacar conclusiones todavía, es todo muy reciente", dijo el ruralista.

El productor recordó que en esta provincia el rodeo vacuno es sobre todo de cría y en estos meses la vaca está criando al ternero que nació en prima­vera, son animales chicos y muchos no sobrevivieron a las lluvias de más de 500 milí­metros que se dieron en sólo 4 días, del 7 al 11 de enero.

"En los campos con ser­vicio de otoño, que están en parición, son los más complicados porque el ter­nero nació en el agua y hubo mortandad por ahogamien­tos. Hay campos que tiene partes altas donde se amon­tonó la hacienda y otros que quedaron totalmente bajo el agua", dijo el productor co­rrentino al portal producti­vo Bichos de campo.

"Los que tenían partes altas abrieron tranqueras y amontonaron hacienda, otros las sacaron a caminos y rutas con altura y otros que quedaron su hacienda y animales totalmente bajo el agua. No tenemos núme­ros, estamos trabajando en medir la afectación. Venía­mos de una seca durísima y ahora nos toca atravesar esto que es muy difícil", explicó.





(Norte)